Comida coreana y ramen en formato restobar
Genki Ya Ramen cuenta con un alargado salón interior con mesas estilo gringo y una par de amplias y protagonistas terrazas en la esquina de Andrés bello con Santa Magdalena.
Un agradable lugar de comida coreana con una estética de restobar que se funde con un dinner gringo. Reguetón de fondo en unos pequeños parlantes pronostican un espacio ondero centrado en carrete juvenil.
Es un restaurante enfocado en los ramen coreanos con una diversa variedad de ellos, pero que en carta se ve un oferta amplia para compartir, con interesantes opciones coreanas y asiáticos en general, como edamames, esferas de arroz glutinoso, frituras marinas, bao, gyosas fritas, y un montos de otras tentadoras alternativas difíciles de pronunciar.
No probamos coctelería, pero van por la de autoría, bajo el nombre de “Botánicos”, con opciones de destilados asiáticos, sake y una gigante variedad de tragos, un pendiente por probar. Carta de vinos al debe.
Para conocer su propuesta elegimos 2 menús basados en sus Ramen, el Pacific y el Chasu, que según el garzón son los mismos de la carta, y que incluyen una versión acodada de sus entradas (ensalada y gyosas) y bebestibles (copa de vino, bebida o café)
Un inicio poco prometedor con una malobradas gyosas fritas y una ensalada de wakame simple y funcional.
Los Ramen de linda presentación -hay que decirlo- , ganan por su generosidad, pero no por sus sabor. Son de estilo coreanos y de formato algo más comercial, cumplen un rol protagonista en carta, pero para un lugar que lleva en su nombre este famoso platillo asiático, uno podría haber esperado mejores resultados.
Para experimentar ramen de buenos y profundos caldos, Genki Ya Ramen no es la mejor opción, pero para disfrutar de una buena y ondera terraza en Andrés Bello, con un prontuario de comida coreana para probar, si es un destino interesante.
TXT: Alejandro Mery L. / abril 2024
El Pacific Ramen apunta a lo marino en un generoso bowl de mucho fideo chino que se siente comercial en un escaso y demasiado suave caldo que poco recuerda a mar, con unos bonitos bastones de kanikama y camarones ecuatorianos bien cocidos que se acompañan con cilantro y cebollín. Lo que sí brilla son esas bolitas de mar rellenas con un sabroso guiso oscuro de mariscos. Es grande pero se lamenta de poco sabor en general.
TXT: Alejandro Mery L. / FOTO: Coni Larrondo ©2024-04
El Chasu Ramen de cerdo llega con una exuberante porción de pasta blanda con un caldo escaso y sabroso que se siente comercial y sin profundidad. Viene con unos sabrosos y delgados cortes de -arrollado de cerdo- Chasu, un buen medio huevo macerado, choclo del congelado, cebollín, dientes de dragón, el necesario nori y un laminita de naruto (decoración de huevo). Con el ají que hay en mesa mejoró bastante.
TXT: Alejandro Mery L. / FOTO: Coni Larrondo ©2024-04