Pastas, pizzas y jazz en una hermosa casona
La pizzería La Fabbrica vino a hacer un doble rescate. Primero, al abrir la Casa Maroto donde está ubicada, edificio patrimonial de 1920 rescatado luego del terremoto de 2010.
Además, este espacio actúa como sede del Club De Jazz de Santiago, que todas las noches arma tocatas con bandas emergentes y consagradas del ambiente jazzístico local.
En cuanto a su carta, esta está basada en pizzas tradicionales que van por el camino italiano, con masa delgada y los ingredientes justos para sentir todos los sabores, además de pastas servidas al dente.
Una de las gracias de este lugar es su horno giratorio, que permite una cocción pareja de sus pizzas.
TXT: Darío Córdova / mayo 2014
FOTOS: Alejandro Mery Leinenweber ©2014-05
Tomate cherry, queso mozzarella di bufala y hojas de albahaca en la Focaccia Caprese